El chef Panoramix reinterpreta este clásico con una receta que combina tradición y sofisticación: Camarones grandes, mantequilla, ajo, vino blanco, ají cacho de cabra y un delicado toque de romero.
Utilizamos mantequilla como base protagonista, sumamos vino blanco para realzar los matices, infusionamos el aceite con romero fresco y terminamos con una fusión de salsas que equilibran lo picante con notas umami.
El resultado: un plato profundo, aromático y perfecto para acompañar con pan crujiente y una copa de buen vino.
Aquí va la receta !
Ingredientes (2-3 porciones):
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500 g de camarones grandes, pelados y desvenados
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6 dientes de ajo, laminados finamente
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2 ajíes cacho de cabra (o chiles de árbol), partidos sin semillas
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80 g de mantequilla sin sal
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1 cucharada de aceite de oliva
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1 ramita pequeña de romero fresco
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1/4 taza de vino blanco seco
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1 cucharadita de salsa de ostra
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1/2 cucharadita de salsa inglesa (Worcestershire)
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Ralladura fina de 1 limón
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Sal de mar y pimienta negra al gusto
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Perejil fresco picado (opcional)
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Pan artesanal para acompañar
Preparación:
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Seca bien los camarones y condiméntalos suavemente con sal y pimienta.
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En una sartén amplia, agrega la mantequilla y el aceite de oliva. Añade la ramita de romero y deja que aromatice la grasa a fuego medio por 1-2 minutos. Luego retira el romero.
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Incorpora el ajo laminado y los ajíes cacho de cabra. Sofríe suavemente hasta que el ajo esté dorado claro y fragante (¡sin quemarse!).
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Sube el fuego y añade los camarones. Cocina 1-2 minutos por lado hasta que estén rosados y jugosos.
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Desglasa con el vino blanco y, cuando empiece a evaporarse, incorpora la salsa de ostra. Remueve bien para integrar.
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Al final, agrega unas gotas de salsa inglesa y la ralladura de limón. Ajusta sal y pimienta si es necesario.
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Sirve inmediatamente en una fuente caliente, decora con perejil picado y acompaña con pan crujiente para absorber toda la salsa.
Sugerencia de maridaje:
Un vino blanco seco con buena acidez (Sauvignon Blanc o un Chardonnay joven) o incluso una cerveza ámbar suave maridan perfectamente con los sabores complejos del plato.